Ojalá la vida fuera siempre fácil, un pequeño gesto y ya sabes lo que el otro espera de ti. Pero nos pasamos el día enredados en mil malentendidos y nos alejamos muchas veces de la gente a la que queremos. Nos cuesta comunicar nuestros deseos y casi nos tenemos que sorprender de que las cosas, aunque a veces salgan como nosotros queremos. Igual la clave está en aprovechar las cosas según llegan, sabiendo que a veces es difícil superar el pasado; pero sabiendo también que la vida te suele dar más de una oportunidad. Aprovéchala y no la dejes escapar.

martes, 11 de enero de 2011

No importa el problema, no importa la solución, me quedo con lo poco que queda entero en el corazón.  
Me gustan los problemas, no existe otra explicación, esta si es una dulce condena. 

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